Danzas

 

CONTRADANZA DE COLETORES DE CALAHORRA

 

La contradanza de coletores nos traslada a los carnavales de la Calahorra de hace más de dos siglos en los que cada gremio celebraba el carnaval con danzas y disfraces distintos. Entre estos gremios se encontraban los coletores o trasquiladores de caballos, que saltaban a las calles vestidos con su indumentaria propia e identificativa y que después de los años ha pasado a convertirse en el traje tradicional de Calahorra.

 

La contradanza de Coletores es una explosión de alegría, una explosión de fiesta, que fue recuperada por “Isi” gracias al testimonio y los recuerdos de Quica, la coletora. El baile lo desarrollan cuatro parejas de danzantes enmascarados que hacen distintos juegos y figuras con unos vistosos arcos de colores muy adornados. Toda la danza tiene lugar bajo una lluvia de serpentinas y confetis que convierten el escenario en un auténtico carnaval. 

 

 

 

DANZA DE LOGROÑO

 

La original danza de Logroño homenajeaba la victoria logroñesa sobre los invasores franceses tras el largo sitio al que fue sometida la capital riojana en el año 1521. Con el tiempo, esta pieza fue olvidada y posteriormente se montó una nueva coreografía, ya que el anciano que la recogió de sus antepasados no la recordaba en su totalidad. Una parte de la danza se baila con pañuelos, otra tiene un marcado ritmo militar y la última consiste en unos rápidos cruces. Esta combinación la hacen peculiar y vistosa. Los pañuelos, utilizados en varias danzas riojanas son vestigio del pasado militar pues se usan como metáfora de las armas que antaño utilizarían los encargados de bailarla.

 

 

 

JOTA DE LA RIOJA ALTA

 

La jota de la Rioja Alta se bailaba en toda nuestra región como final de fiestas por gente de todas las edades y clases sociales. Antiguamente se bailaba por ejemplo después de las romerías que se hacían en el campo por alguna celebración. Al ser una danza de corro, permite que en el centro se coloquen estandartes, imágenes religiosas e incluso personas a homenajear, con el fin de bailar alrededor de ellos.

 

 

 

JOTA DE VUELTAS DE ARNEDO

 

En San Juan, a principios del siglo XX, existía la costumbre de acudir en romería hasta una finca ya segada donde existía un peral. Los músicos tocaban subidos al árbol y se bailaba a la sombra de éste. Probablemente aquí radique el origen de la Jota de Vueltas, jota recuperada a principios de los ochenta gracias a la labor de recuperación del folclore riojano de Mª Isidra Santos, a través de la Asociación Cultural “Amigos de Arnedo”. Federico Gil de Muro, director de la banda de música de Arnedo, creó la partitura con la ayuda de algunos ancianos que cantaron la música como la recordaban. Posteriormente, “Isi”, junto al grupo de danzas de Arnedo, montó una coreografía provisional de difícil ejecución, a base de pasos combinados con vueltas muy rápidas. Dada la belleza de esta coreografía se mantiene como tal hasta nuestros días, siendo una de las joyas del folclore riojano.

 

 

CONTRADANZA DE BRIONES O "EL BORRACHO"

 

En esta pieza de la tradición folclórica riojana, se entremezcla la danza con un elemento tan importante para nuestra cultura como es el vino. Mientras los danzantes están en plena acción desarrollando una rápida coreografía, aparece el cachibirrio o cachiberrio (popularmente también conocido como "cache"), una peculiar figura característica del folclore de nuestra región. Este personaje, conocido como el tonto del pueblo, se convierte en realidad en el protagonista y director de la danza. En ésta en particular, el borracho bebe de la bota sin parar hasta que después de unos cruces y saltos con los danzantes, entre traspiés y pérdidas de equilibrio, y ante los claros síntomas de embriaguez, trata de congraciarse con los danzantes ofreciéndoles su rico brebaje. Después  muere y el grupo lo levanta, en una figura que se denomina “el muerto”. A continuación, llega el momento de la resurrección y se eleva sobre los hombros de sus compañeros, coronando un castillo humano, para vitorear al Cristo, al pueblo, al folclore, a los forasteros y al vino. 

 

 

 

DANZA DE SAN MILLÁN O "LA BAILADORA"

 

Cuando los reyes de Navarra visitaban San Millán de la Cogolla, el grupo local de danzantes les agasajaba con esta danza, “la bailadora de San Millán de la Cogolla”.  Se trata de una recopilación coreográfica de varias de las contradanzas que antiguamente se interpretaban en la zona de San Millán cuyos nombres eran: "La venia"; "El bailao"; "el pasacalles"; "la cadena"; "la cascabelada" y "la larga".

 

La coreografía consiste en una mezcla de danza pastoril y guerrera, con un marcado ritmo cortesano al principio, pero que acaba con una melodía de pasos más acelerados. Igual que algún otro baile riojano, la danza de San Millán está dirigida por un "cache".

 

 

 

LA MORENITA DE ZARRATÓN

 

Esta es una de las joyas del folclore riojano, interpretada por el grupo local de Zarratón desde el siglo XV. Cuenta la historia que en aquellos tiempos, Zarratón disponía de siete iglesias, borradas ahora por el paso de los años. Cada uno de esos siete barrios tenía su danza aunque no se haya llegado a conocer cuál correspondía a cada uno. En la festividad de San Blas, todos los barrios se congregaban en la parroquia y los danzantes de cada uno bailaban por separado para terminar haciendo la unión de varios bailes. Algunas de estas danzas tenían letra y también se cantaban.

 

De las siete danzas de Zarratón quedaron cuatro y Don Eliseo Pinedo (músico natural de Zarratón y fundador del conservatorio) unió partes de ellas para montar una grande. Uno de los troqueados que se danzan es de la original morenita mientras el resto son pasos de las ovejitas, el bailao y los caballitos.

 

 

 

DANZA DE LA FLOR DE MANSILLA

 

La danza de la Flor de Mansilla, es conocida popularmente como la "danza de los enamorados". En sus orígenes, los mozos buscaban, con un beso, ser correspondidos por una moza. Si ésta no aceptaba el beso, el mozo debía buscar a otra moza que le correspondiese y en ese momento comenzaba la danza. El beso fue sustituido en los años 50 por una flor, de ahí el nombre de "la flor de Mansilla". Este baile representa una antigua tradición de muchos pueblos de España, el sorteo de mozos y mozas antes de un baile. Si la chica danzante acepta la flor del chico, será  su pareja de baile. Es una danza originaria de la bella villa desaparecida bajo las aguas del pantano de Mansilla.

 

 

 

BARRAS DE SAN VICENTE

 

Esta danza hace referencia a los enfrentamientos entre los Reinos de Castilla y Aragón en cuyas fronteras se encontraba la localidad de San Vicente. Ocho danzantes bailan con un marcado ritmo militar y portando barras metálicas. Entre las figuras que componen la danza destaca el puente, representando el único punto de unión entre ambos reinos. Inicialmente esta danza sólo la bailaban hombres y las barras han sustituido a las espadas con las que ellos bailaban.

 

 
 

 

EL AHORCADO DE SORZANO

 

Constituye una de las danzas más importantes de la localidad de Sorzano. Esta danza se desarrolla alternando piezas al son de las castañuelas con trenzados hechos con pañuelos de colores. Los danzantes van haciendo diferentes figuras con los pañuelos: túneles, corros y la mesa, un complicado trenzado y destrenzado que se realiza a gran velocidad. Otra de las figuras, la que da nombre a la danza, simula el ahorcamiento de uno de los danzantes al que se le rodea con todos los pañuelos a la altura del cuello.

 

 

 

ARCOS DE SAN ASENSIO

 

En este baile, que data del siglo XVI, ocho danzantes bailan sujetando un arco de flores guiados por el "cache" que lleva otro más pequeño o un palo. Sin dejar de balancear enérgicamente el arco, se realizan diversos movimientos y figuras: túneles, cadenas, enlaces…

 

 

 

EL ÁRBOL DE ALBELDA

 

La danza del Árbol de Albelda, es un baile propio de la sierra, especialmente de la rioja alta y de la zona del los cameros. Las danzas de árbol intentan representar el ciclo del año, la danza es circular al igual que la floración, la recogida de la fruta y el otoño. Hay dos simbolismos, el primero como muestra de agradecimiento al árbol por sus frutos y la madera que nos da y el segundo como símbolo de renovación, representado por el trenzado y el destrenzado.  Antiguamente el árbol de Albelda era solo un trenzado hasta que en 1932, Urbano Abeytua, bisabuelo de los gaiteros de Albelda, que dirigía la danza, reagregó un segundo trenzado.

 

 

 

EL CANARIO DE SORZANO

 

Se trata de uno de los paloteados más característicos del folclore de nuestra tierra. Ocho danzantes ejecutan una serie de troquelados, algunos de ellos a gran velocidad. La danza se vuelve cada vez más rápida y complicada a la vez que el gaitero aumenta el ritmo de su música.

 

 

 

DANZA DE LA PEREGRINA DE LEIVA

 

Cuenta la leyenda que la Virgen Peregrina y el Niño Jesús llegaron peregrinando a Leiva. Allí nadie les abrió sus puertas salvo una pobre mujer que vivía en una humilde choza y que lloraba la muerte de su pequeño hijo recién muerto y que todavía yacía en una de las habitaciones. A la mañana siguiente, la Virgen agradeció su caridad devolviendo la vida al pequeño justo antes de partir de la mano del Niño Jesús y alejarse de la tierra riojana camino a Burgos.

 

La danza quiere recordar esta historia. Se bailaba al bajar de la ermita de San Vítores (el primer sábado de Mayo) por el lugar por donde pasaba la antigua calzada romana de Livia. Los danzantes, vestidos con el traje de peregrino, llevan un ritmo muy pausado al bailar mientras golpean con el bordón o palo largo en el suelo.

 

 

 

JOTA DE SAN FELICES DE HARO

 

Antiguamente, en Haro, después de bajar de la ermita donde el patrón de Haro, San Felices, vivió como eremita y de la popular batalla del vino, había un concurso de baile de jotas. Éste tenía lugar al llegar a la plaza donde con la música de la Jota de San Felices se bailaba en parejas.

 

Actualmente esta jota la bailan 6 parejas y se caracteriza por su gran número de cambios de fila y un vals que, en mitad de la danza, reduce su rápido ritmo.

 

   
 

 

JOTA DE BRIONES

 

Danza bailada por un número variable de parejas (ocho tradicionalmente aunque muchas veces se baila de cuatro) que en determinados momentos forman grupos de 4 al son de la jota y otras veces un corro. Es una danza vistosa y variada. Destacan los rápidos giros del comienzo, los barridos o cruces rápidos y el vals.

 

   
 

 

DANZA DE LA VIRGEN BLANCA DE VENTOSA

 

Se dice que es una de las danzas más antiguas de la rioja. Aunque es originaria de la localidad de Ventosa, hoy se baila en toda la geografía riojana aunque con ligeras variaciones. Es una danza en la que dos filas de parejas de espalda a la Virgen Blanca balancean los pies hasta que en un momento dado se giran para bailar hacia ella.

 

 

 

PAÑUELOS DE LAGUNA DE CAMEROS O "LOS QUINTOS"

 

Esta danza de la localidad de Laguna de cameros se realiza con pañuelos haciendo diferentes figuras. La música es de una canción que las mozas cantaban a los quintos cuando se iban a realizar el servicio militar.

 

   
 

 

LA SINDA

 
   
 

 

JOTA DE REPELA